Los gatos son animales que por naturaleza y antepasados, tiene la habilidad de la cacería. Esto lo podemos notar en varias ocasiones, incluso cuando juegan. Se puede ver como su gran sigilo al andar y luego facilidad para aventarse sobre su presa.

Como ya se mencionó, es un tema de genética, lo cual significa que está presente en todos, pero no tiene el mismo impacto en uno que en otro. Los gatos que tienen la caza más a flor de piel, son los que gustan más de jugar con elementos de cacería, como cañas con un juguete en la punta, ratones de cuerda, etc. Estos últimos son los que van desarrollando más su habilidad para cazar y acostumbrarse a alcanzar esta presa.

Si tu gatito no presenta muchas ganas de cazar, no lo fuerces, porque simplemente no lo hará. Si tu gatito tiene desarrollado el instinto de caza, es probable que se encargue de atrapar visitas indeseadas en casa (roedores y cucarachas).

Ya lo sabes, no culpes a tu gatito por no atrapar al visitante indeseado si no está familiarizado con dicha habilidad